Quiero abrir la puerta y salir corriendo como lo hizo Forrest.

Quiero correr sin parar, sin una meta.

Sé que no me cansaría.

Sé que volvería cargada de historias porque desde chica soy una especie de storyteller compulsiva.

Quiero abrir la puerta y salir corriendo

y esto no es una metáfora.

Pero me enemisto con los puntos cardinales

y la infinidad de subcaminos posibles.

Insisto una vez más,

"La encrucijada de la vida es no saber por qué vivir"